ARTÍCULO ORIGINAL
Conservación de recursos forestales y género, en el marco del desarrollo sustentable. El caso de la comunidad indígena barrio de San Miguel, Michoacán, México
Conservation forest resources and gender, under the sustainable development. The case of the indigenous community barrio de San Miguel, Michoacan, Mexico
Revista Cubana de Ciencias Forestales
Año 2014, Volumen 2, número 2
José Antonio Hernández-Moreno1, Miriam Aidé Núñez-Vera2
1Ingeniero forestal, Pasante de Maestría en Ciencias en Desarrollo Rural Regional, por
la Universidad Autónoma Chapingo, Centro Regional Universitario
Centro-Occidente. Periférico Paseo de la República No. 1000, Colonia Lomas del Valle, Morelia,
Michoacán, México. Tel. Cel. (443) 394 0963. Correo electrónico:
tecnobiosfera27@gmail.com
2Profesora investigadora del Centro Regional Universitario Centro-Occidente.
Periférico Paseo de la República No. 1000, Colonia Lomas del Valle, Morelia, Michoacán,
México. Tel. Cel. (443) 258 9200. Correo electrónico:
miri_nuve@yahoo.com.mx
RESUMEN
Este estudio tuvo su proceso en unalocalidaddel estado de Michoacán, México, llamada Comunidad Indígena Barrio de San Miguel, en la municipalidad de Uruapan. La investigación consistió en analizar, desde el enfoque de género, el funcionamiento de estrategias de conservación forestal implementadas por las mujeres ante el detrimento de su bosque y el menoscabo de las condiciones de vida de sus familias, para mitigar el deterioro ambiental, al mismo tiempo que se adaptan a las condiciones socioeconómicas y ambientales de la comunidad.Mediante el presente análisis, se estudiaron los principales efectos que tienen las políticas públicas sobre la conservación de recursos forestales, en el bienestar y en las opciones de vida de las mujeres rurales, así como en la conservación del propio bosque.La presente investigaciónpretende ser un aporte a la discusión sobre la articulación género-conservación de recursos forestales, mediante la presentación de un estudio de caso. Se ilustra la complejidad de la articulación género-conservación de recursos forestales, por medio del análisis de tres puntos clave, observados desde la perspectiva teórica de Género Medioambiente y Desarrollo Sustentable: Acceso, Uso y Conservación de recursos forestales.
Palabras clave: estrategias de conservación; bosque; mujer rural; políticas públicas.
ABSTRACT
This study had its process in the indigenous community Barrio de San Miguel, town of Uruapan Michoacán state, in Mexico. The research consisted of analyzed, from a gender perspective, operation of forest conservation strategies implemented by women to the detriment of their forest and the deterioration of the living conditions of their families, to mitigate environmental degradation, while adapting to socio-economic and environmental conditions of the community.By this analysis, were studied the main effects of public policies on the conservation of forest resources, on wellness and life choices of rural women, well as the preservation of the forest.The present investigation intended as a contribution to the discussion on the joint gender-conservation of forest resources, by presenting a case study. The complexity of the joint illustrated gender-conservation of forest resources, by analyzing three key points, observed from the theoretical perspective of Gender Environment and Sustainable Development: Access, Use and Conservation of Forest Resources.
Key words: conservation strategies; forest; rural women; public policies.
INTRODUCCIÓN
La globalización, la tecnología moderna, las formas de producción y consumo, han favorecido la destrucción del ambiente natural, siendo la sociedad humana una de las causantes de dicha degradación. Aunado a ello, desde los ochenta, se enfatizó que las mujeres fueron «las principales víctimas del deterioro ambiental, además de catalogarlas como adaptadas para soportar catástrofes como las sequías, y se consideran víctimas del deterioro ambiental, de desarrollo mal planeado, que han debilitado sistemáticamente los recursos para mantenerse con vida» (Shiva, 1988: citada en Leach, 2004).
En la mujer se presenta, por cuestiones de género, un compromiso con la protección ambiental. Por lo que realiza prácticas de conservación como construcción de terrazas, plantación de árboles, así como el manejo de plantas y semillas silvestres para su conservación y reproducción. En algunas comunidades rurales culturalmente ella realiza prácticas y técnicas de uso y conservación de los recursos naturales, que mantiene por años. Esto le ha permitido tener acceso a la alimentación humana y animal; por ello es necesario preservar la cultura de conservación y resaltar el conocimiento local de las y los productores.
La conservación de los bosques del mundo requiere de la adopción de una serie de medidas que impliquen un cambio de rumbo al actual modelo de destrucción. Una de las mayores amenazas para la vida de hombres y mujeres en la Tierra es la deforestación. Los bosques ayudan a mantener el equilibrio ecológico y la biodiversidad, limitan la erosión en las cuencas hidrográficas e influyen en las variaciones del clima. Asimismo, abastecen a las comunidades rurales de diversos productos, como la madera, alimentos, combustible, forrajes, fibras, fertilizantes orgánicos, etc.
El interés de esta investigación surgió por estudiar desde la perspectiva de género, y mediante un estudio de caso en la Comunidad Indígena Barrio de San Miguel, la conservación forestal, así como para analizar el funcionamiento de las estrategias de las mujeres, relaciones, percepción de los recursos naturales, e indagar la valoración del trabajo que realizan dentro de la comunidad, para determinar el impacto en la conservación de los recursos forestales (aun cuando están sometidos a la presión de la ciudad de Uruapan) para sostener las actividades de preservación en comparación a sus comunidades vecinas.
MATERIAL Y MÉTODO
Descripción de la zona de estudio
Michoacán se encuentra en la parte oeste de la República Mexicana y se ubica entre los ríos Lerma y Balsas, el lago de Chapala y el Océano Pacífico. Este estado forma parte del Eje Neovolcánico y la Sierra Madre del Sur. Colinda al norte con el estado de Jalisco, Guanajuato y Querétaro; al este con Querétaro, México y Guerrero; al sur con Guerrero y el Océano Pacífico; al oeste con el Océano Pacífico, Colima y Jalisco(Figura 1).La superficie territorial del estado de Michoacán es de 58,599 km², lo que representa un 3% de todo México; cuenta con una población aproximada de 4 millones 351 mil 037 habitantes (INEGI, 2010).
El municipio de Uruapan está ubicado en la porción occidental del estado de Michoacán (Figura 1), entre los paralelos 19° 17' y 19° 45' latitud norte, y los meridianos 101° 50' y 102° 14' longitud oeste. Limita al norte con los municipios de Los Reyes, Charapan, Parachoy Nahuatzen; al este con Tingambato, Ziracuaretiro y Taretan; al sur con Gabriel Zamora, Parácuaro, y al oeste con Nuevo San Juan Parangaricutiro, Tancítaro y Peribán (Boccoet. al., 2001). Su distancia a la capital del Estado es de 120 km. Su superficie es de 954.17 km², lo que representa 1.62 % del total estatal.
La comunidad indígena Barrio de San Miguel (CIBSM) se encuentra ubicada dentro del municipio de Uruapan, limitando al sur con la cabecera municipal Uruapan, actualmente representa uno de los principales pulmones de la misma. Las coordenadas geográficas de la comunidad son 19° 26' 16"de latitud norte y 102° 03' 06" de longitud oeste. Adquiere su resolución presidencial el 17 de enero de 1989, por una superficie total de 549.21 hectáreas y un número de 176 beneficiados, (Tabla1).
La comunidad está enclavada en las estribaciones del sistema volcánico transversal denominado Eje Neovolcánico. En general las condiciones topográficas son muy variadas por tratarse de una zona de volcanes extintos, las pendientes fluctúan entre 15 y 40 % y en las barrancas se presentan pendientes más fuertes, en algunos casos de hasta 80 %. El clima de la región es de tipo templado, con abundantes lluvias verano, con una precipitación media de 1, 652 mm y una temperatura media anual de 20°C.
Metodología
El presente estudio se realizó desde la perspectiva de género, observando el proceso de conservación de recursos forestales por mujeres y hombres de la comunidad Barrio de San Miguel, con la finalidad de conocer las estrategias de conservación implementadas como forma de resistencia, ante el deterioro del recurso forestal de su comunidad, las transformaciones ocurridas en su nivel de vida, en sus relaciones de género, y su organización social, así como analizar las políticas públicas forestales de las que ha sido sujeta la comunidad. El análisis de género está muy relacionado con las aportaciones de los movimientos de mujeres de los llamados países del Sur de Latinoamérica. (Benería y Roldán, 1992).
Utilizar la categoría de género como herramienta metodológica es imprescindible para explicar las diferencias de sexo en el contexto de la conservación forestal. El género nos permite comprender las relaciones entre mujeres y hombres como una construcción social, a través de la cual las sociedades crean una concepción del mundo, ideas, valores, actitudes y conductas a partir de la diferencia sexual (Núñez, 2000). El enfoque de género se orienta a la comprensión de las relaciones sociales que se desarrollan en una determinada sociedad y parte del principio de que las formas de participación, acceso y control generan relaciones de poder que se expresan en la toma de decisiones. Por ello, busca el «empoderamiento» de la mujer; es decir, fortalecer su posición social, económica y política (Lamas, 1986).
El estudio fue de corte cualitativo sin contraponerse a la utilización de herramientas cuantitativas (Babbie, 2000), se aplicó un cuestionario a 17 mujeres y 13 hombres para determinar las condiciones socioeconómicas y ambientales de la comunidad, usando las fortalezas de ambos tipos de indagación, combinándolas y tratando de minimizar sus debilidades potenciales. Los métodos mixtos representan un conjunto de procesos sistemáticos, empíricos y críticos de investigación e implican la recolección y el análisis de datos cuantitativos y cualitativos, así como su integración y discusión conjunta, para realizar inferencias producto de toda la información recabada y lograr un mayor entendimiento del fenómeno bajo estudio (Hernández et. al., 2010).
Por otro lado, durante el presente estudio, se utilizaron, de manera transversal, los enfoques y conceptos del paradigma de conservación en el marco del desarrollo sustentable, así como las posturas conceptuales y de categorías expresadas dentro del el enfoque desarrollista llamado Género, Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable (GMADS)1, ayudando estos dos paradigmas en la explicación, discusión, análisis y debate de los fenómenos que intervienen el proceso del problema de investigación planteado.
Finalmente, se realizó el tratamiento de análisis de información para conocer los resultados y verificar las hipótesis para obtener las conclusiones, y de esta manera terminar nuestro estudio. La información fue analizada mediante los paquetes computacionales QSR NVivo 10.0.303 programa de apoyo diseñado para la investigación cualitativa y de métodos mixtos.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
La comunidad indígena Barrio de San Miguel, tuvo un periodo de más de 9 años representada por mujeres, desde el año 2004 (CIBSM) al 2013, en el cual comenzaron a obtener apoyos de gobierno federal, específicamente de la CONAFOR, única y exclusivamente para conservación. Durante este periodo, las representantes de la comunidad se han dedicado a inculcar a los comuneros y comuneras la conservación de los recursos forestales, esto también debido a que desde el 17 de febrero de 1937 a partir de un decreto presidencial se designa al bosque que rodea la ciudad de Uruapan como Área de reserva ecológica. Desde hace medio siglo no se aprovecha el bosque, los habitantes de la comunidad dependen económicamente de los empleos de la ciudad, según el INEGI (2010).
Con las actividades de conservación, que duran por lo menos seis meses al año, se da empleo como jornaleras y jornaleros en trabajos del bosque a un total de 80 personas de la comunidad (30 mujeres y 50 hombres), de acuerdo a la figura2:
Los datos arrojados por las encuestas y entrevistas, acerca de la composición familiar y ocupaciones por género, se encuentran en las figuras 3, 4, 5 y 6:
En el anterior conjunto de gráficos podemos observar la manera en que se componen las familias, mostrando claramente que existe un mayor porcentaje de mujeres, y ellas son las que tienen más diversificado su rango de actividades, además de representar el 60 por ciento de los votos en la Asamblea comunal2. Así mismo se puede observar que dentro de la comunidad prácticamente el único trabajo es el de participar en las actividades de conservación, los demás empleos se encuentran en la ciudad de Uruapan. En la figura 7 se muestra que el uso de conservaciónde los recursos naturales es el que predomina, mientras que, en el área de traspatio, el 50% de las familias que lo posee las actividades más frecuentes son la producción de alimentos y las crías de animales (Figura8), siendo estas exclusivas de las mujeres.
Los hallazgos de la presente investigación conducen a interpretar que el punto medular y detonante para la organización comunitaria, encabezada por mujeres, se dio a partir del año 2004, cuando un grupo de comuneras y comuneros urgieron la necesidad de conservar su bosque3, debido a que no estaba regulado el acceso y uso del mismo. Antes de ese año solo se hacían reforestaciones voluntarias esporádicas.
Se identificaron tres principales problemas que aquejaban4 a la comunidad y amenazaban al bosque, y por lo que decidieron organizarse y pedir apoyos al Estado. La primera, y más fuerte, es la presión que ejerce sobre el bosque la mancha urbana que a su vez redunda en la invasión ilegal de lotes y predios pertenecientes a la CIBSM, haciendo de esto un grave problema de ordenamiento de tierras municipales y de la propia comunidad durante décadas5.
La segunda, es el robo de madera y resinación clandestina6, efectuada por comunidades vecinas a la que es objeto de este estudio; y la tercera se da como consecuencia a las dos anteriores, la de carácter medioambiental como la erosión, contaminación de cauces y arroyos, los incendios, las plagas y enfermedades.
Las estrategias de conservación
Dentro de las estrategias de conservación y generación de recursos económicos que implementaron el grupo de comuneros7 , con liderazgo femenino (en el momento histórico ya mencionado en el apartado anterior), la principal, fue precisamente tener liderazgo femenino8, debido a que ellas representan la mayoría de los habitantes de la comunidad y fueron elegidas popular y democráticamente en Asamblea Comunitaria.
Posteriormente, se trabajó en la organización comunitaria requerida para obtener recursos del gobierno federal. Es decir, la comunidad, con sus representantes mujeres, tuvo que organizarse en su Asamblea General y conformar un grupo representativo que posteriormente echaría mano de lo que en ese momento había como política pública para el desarrollo forestal sustentable, los programas de la CONAFOR, en su estrategia de conservación forestal, que inició con la solicitud de recursos para ejecutar cuatro proyectos que fueron base de la organización comunitaria:
- Ordenamiento Territorial Comunitario (OTC), que representa un documento rector de las actividades a realizarse dentro de los límites de la CIBSM, que consta de un diagnóstico y análisis técnico profundo de las condiciones territoriales y el estado actual de la comunidad.
- Se realizaron Talleres Participativos de Servicios Ambientales (TPSA) a nivel regional, como consulta ciudadana a la percepción que se tiene de los bosques y los servicios ambientales que estos generan, con la intención de que las comunidades vecinas accedieran, al igual que ellos, en el PSAH9 de la CONAFOR
- Se le dio carácter legal a los Estatutos Comunales (EC) que rigen la vida cotidiana dentro de la comunidad, siendo este el documento base de reglas y normas que se aplican actualmente en la comunidad.
- Se elaboró un Proyecto de Factibilidad de Turismo Alternativo(PFTA), ya que comprendieron el potencial que su bosque posee para este tipo de actividad por su cercanía a la ciudad de Uruapan, y que es a la vez productiva y de conservación.
Estas bases de organización comunitaria10, fueron el detonante para que la comunidad participara de apoyos gubernamentales y comenzaran a tener un beneficio de su bosque. Esto les permitió acceder a posteriores apoyos y conservar el bosque de manera sustentable.
Una más de las estrategias que implementó el grupo de representantes, es que en cada uno de los apoyos se le daba empleo única y exclusivamente a comuneros, o en su defecto, y por las cuestiones de edad que se mencionaron en el apartado anterior, a hijos/as o nietos/as de comuneros. Para que con ello, los comuneros y comuneras comenzaran a ver beneficios del bosque a manera de autoempleo11.
Un importante apoyo que obtuvo la comunidad, fue la creación de un parque ecoturístico, con superficie de 3 ha, en el cual se tiene un total de 10 empleados todo el año (6 mujeres y 4 hombres), cuenta con un área donde se reciben grupos de escuelas, principalmente de nivel primaria, en donde se imparten talleres de educación ambiental y recorridos por el parque.
Desde esta configuración de subsistencia en la comunidad, usando la categoría de análisis de conservación del desarrollo sustentable, y entroncado a su vez con el enfoque de desarrollo GMADS, se puede decir que después de más de cuarenta años de estudios se ha demostrado que la promoción y reconocimiento a la participación de las mujeres12, así como su fortalecimiento en el acceso, uso, gestión, manejo y conservación de los recursos, resulta fundamental para el desarrollo sustentable.
A continuación en la figura 9, se muestra un análisis de la CIBSM con respecto al acceso, uso y conservación de los recursos forestales, referidos a los postulados o principios básicos del GMADS, los cuales fueron pieza clave en el análisis del presente estudio; en donde se plasma de manera general las relaciones de género, la conservación, y la participación de las mujeres y hombres, en torno a las estrategias de conservación que se implementaron en la comunidad frente a la problemática ambiental.
Las mujeres de la CIBSM han estado vinculadas a la gestión de recursos, el manejo del parque ecoturístico, a las labores silviculturales, a la producción de planta en vivero durante una década; es por ello que a pesar de ser relativamente escasas las experiencias de investigación del tema de recursos forestales en México desde un enfoque de género, y que prevalece la exclusión de las mujeres en los espacios de toma de decisiones, el presente estudio de caso pertenece más a la excepción que a la regla, porque existen avances en la materia que dan cuenta de procesos internos que apuntan hacia un empoderamiento13 femenino.
Lo anterior es importante ya que al interior de los procesos de acceso, uso y conservación de los recursos forestales están implícitas las relaciones de poder14; ya que las normas vigentes en la CIBSM son resultado de procesos de confrontación, negociación y adaptación, donde los actores y actrices sociales movilizan recursos materiales y simbólicos para acceder al bosque, usarlo, conservarlo y controlarlo (Kabeer, 1998).
La política pública para la conservación forestal en Barrio de San Miguel
Como se pudo observar en los acápites anteriores, a pesar de que los apoyos de la política pública para la conservación forestal no incluyen la mayoría de las acciones que las mujeres efectúan, más bien se enfocan a los trabajos de monte que son más acorde para los hombres, existen comuneras que se dedican, al igual que los hombres, a las labores silviculturales de conservación forestal. A la fecha la mayoría de las acciones puestas en marcha por el Estado15, a manera de política pública dentro del marco de la sustentabilidad, han sido de carácter técnico y dirigido principalmente a la población masculina.
El gran eje rector en el que se sustenta la CONAFOR, y en el que están basados sus programas de política pública y sus reglas de operación, y al que compete directamente el desarrollo forestal sustentable en México es, precisamente, la «Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable (LGDFS)»16.
Asimismo, la propia CONAFOR propuso en el 2001 el «Programa Estratégico Forestal para México 2025 (PEF 2025)»17 con el cual elaboró un diagnóstico, los objetivos, las estrategias y las acciones prioritarias que orientarán hacia un desarrollo forestal sustentable del país en los próximos 25 años.
En este contexto, puedo mencionar que en la LGDFS en cuyo primer objetivo se menciona el componente de desarrollo social18, en donde se supone que se debería incluir la equidad de género, al hacer una revisión con la finalidad de encontrar contenido de género, solo se encontró en el capítulo IV que tiene que ver con la coordinación institucional, en su Art. 27, inciso VI: «Apoyar a la mujer del medio rural de los territorios forestales en proyectos relacionados con leña combustible (manejo, plantaciones y estufas ahorradoras), componentes forestales para el traspatio, cosecha de agua y sobre labores silvícolas», lo cual nos sigue dando un claro ejemplo de la reproducción de los roles tradicionales de la mujer, y en ningún momento la hace partícipe de la toma de decisiones.
Asimismo, en el capítulo VI de los Servicios Ambientales Forestales, en su Art. 134 Bis (de los instrumentos legales y de política ambiental para regular y fomentar la conservación y mejora de los servicios ambientales), inciso IV menciona: «Inclusión y equidad territorial, cultural, social y de género», adicionado apenas el 4 de junio de 2014. Esta mención solo se observa en uno de los 18 los principales componentes en materia forestal.
Por otro lado, al revisar el documento creado por la propia CONAFOR para el desarrollo forestal sustentable del país, el PEF 2025, se encontró que no cuenta, en su componente social con la perspectiva de género requerida para lograr el desarrollo forestal sustentable; ya que en sus 191 páginas y cerca de 400 objetivos, estrategias y líneas de acción prioritarias, solo menciona a la mujer en su apartado 7. 5. 2., en cuanto al tema de capacitación forestal, en su línea de acción prioritaria, inciso b): «Fomentar la capacitación práctica por productores-capacitadores, acorde a cada tipo de actividad, el trabajo operativo en condiciones reales, una mayor incorporación de las mujeres, otorgar becas para técnicos comunitarios de la Red de Centros de Capacitación Demostración en los programas para formadores». El problema es que no propone una categoría de apoyo específica para las mujeres, o en la gama de apoyos de la CONAFOR, no se encuentra la perspectiva de género inserta, solamente hace mención de «una mayor incorporación de las mujeres», sin dar ningún otro seguimiento al tema en todo el documento del PEF 2025.
Por último, se revisaron las reglas de operación19 del actual programa de la CONAFOR, en las cuales se establecen los criterios y pautas para acceder a los apoyos de la institución. Al respecto, se encontró que, de los 46 conceptos de apoyo, distribuidos en seis componentes, no existe ningún apoyo que mencione las necesidades de las mujeres para promover del desarrollo forestal sustentable. Únicamente se hace mención a las mujeres en la sección III, del proceso de selección y asignación de apoyos, en el Art. 23, de los criterios generales y la tabla de puntuación: «La persona moral solicitante integra en su órgano de representación mujeres o la persona física solicitante del apoyo es mujer», en donde el solicitante que cumpla esta condicionante, tendrá mejor puntaje en la elección final de beneficiarios del programa.
Aun cuando en México se cuenta con normas jurídicas sólidas y con marcos programáticos y presupuestales que pretenden garantizar la igualdad entre mujeres y hombres, con este ejemplo de política pública para el desarrollo forestal sustentable, queda claro, que no se está aplicando todo ese marco jurídico, y que tampoco está rindiendo frutos todo lo que parecía ganado con los movimientos de mujeres.
CONCLUSIONES
A manera de conclusiones podemos mencionar que la presente exposición pretende hacer un aporte a la discusión sobre la articulación género-conservación de recursos forestales, mediante la presentación de un estudio de caso.
Uno de los temas clave, detectado en el estudio, es que el hecho de que la comunidad sea parte de un área de protección forestal, como ya se mencionó, obligó a los hombres a salir a buscar empleo fuera de su comunidad y no presentar interés en el bosque por no obtener de él beneficios económicos inmediatos, al grado de ceder sus derechos como comuneros a otras personas, en este caso, esposas, hermanas o hijas; tal situación orilló a los habitantes en general, y en este caso a las mujeres a erigirse como representantes, a implementar estrategias de conservación y echando mano de políticas públicas medioambientales ofrecidas por el Estado, aun cuando estas políticas no sean equitativas en el tema de género. Las mujeres líderes del grupo, tuvieron que adaptarse a lo que la gama de apoyos gubernamentales ofrecía en ese momento y trabajar como comunidad para lograr un desarrollo sustentable incipiente.
- Las mujeres en Barrio de San Miguel han jugado un papel determinante en la conservación del bosque, desde el ámbito doméstico hasta el ser representantes de la comunidad por varios años. Son ellas, por lo menos durante el periodo de tiempo que hubo representación comunal femenina, las que determinaron las estrategias para la conservación forestal, siendo incluyentes con los hombres de la comunidad. Uno de los temas clave, detectado en el estudio, es que el hecho de que la comunidad sea parte de un área de protección forestal, como ya se mencionó, orilló a los habitantes en general, y en este caso a las mujeres como representantes, a implementar estrategias de conservación y para ello echaron mano de políticas públicas medioambientales ofrecidas por el Estado, aun cuando estas políticas no sean equitativas en el tema de género, tuvieron que adaptarse a lo que la gama de apoyos gubernamentales ofrecía en ese momento y trabajar como comunidad para lograr un desarrollo sustentable incipiente.
RECOMENDACIONES
Se propone que en la formulación y planeación de políticas públicas a diseñarse, se deberá considerar lo que Young (1988) describe como las necesidades prácticas de género20, así como, los intereses estratégicos de género21. Entonces para aclarar la causa de la preocupación, se debe distinguir entre condición y posición de la mujer. Por condición se refiere al estado material en el cual se encuentra la mujer: su pobreza, su falta de educación y capacitación, su excesiva carga de trabajo, su falta de acceso a la tecnología moderna y a las políticas públicas que las consideren. La posición supone su ubicación social y económica respecto a los hombres.
Resulta necesario llevar a cabo estudios que apoyen el diseño y la instrumentación de dichas políticas públicas, mediante el conocimiento y el entendimiento de los procesos económicos, sociales, culturales y políticos, a través de los cuales se dan el uso y manejo de los recursos naturales en su entorno natural, así como de aquellas prácticas que producen cambios ambientales (Velázquez, 1997).
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Recibido: 1 de diciembre de 2014.
Aceptado:
9 de diciembre de 2014.
José Antonio Hernández-Moreno. Ingeniero forestal, Pasante de Maestría en Ciencias en Desarrollo Rural Regional, por la Universidad Autónoma Chapingo, Centro Regional Universitario Centro-Occidente. Periférico Paseo de la República No. 1000, Colonia Lomas del Valle, Morelia, Michoacán, México. Tel. Cel. (443) 394 0963. Correo electrónico: tecnobiosfera27@gmail.com