ARTÍCULO ORIGINAL
Análisis del grado de ocupación por los bejucos en el Bosque pluvial montano del Parque Nacional Turquino
Analysis occupancy by lianas in the montane rain forest Turquino National Park
Revista Cubana de Ciencias Forestales
Año 2016, Volumen 4, número 2
José Luis Rodríguez Sosa1, Calixto Aguilar Espinosa2, José Yulier Rodríguez Milanés2
1Doctor en Ciencias Forestales. Máster en Ciencias Forestales. Universidad de Gramna, Cuba. Correo electrónico: jrodriguezs@udg.co.cu
2Ingeniero en Ciencias Forestales. Universidad de Gramna, Cuba.
RESUMEN
El estudio se realizó en el Bosque pluvial montano del Parque Nacional Turquino con el objetivo de evaluar la ocupación por los bejucos en los árboles. Se realizó un muestreo aleatorio ubicando 70 parcelas de 100 m2, donde se registraron los individuos con más de 5 cm de d1,30m. Para determinarel efecto de los bejucos sobre la estructura del bosque se determinó el grado de ocupación por los mismos sobre los árboles considerando cuatro categorías. La riqueza florística del bosque estuvo concentrada en la presencia de 74 especies, 65 de árboles y 9 de bejucos asociadas a 58 géneros de 35 familias y 8 géneros de 7 familias respectivamente La flora arbórea presentó un alto porcentaje de afectación por los bejucos (74%), afectándose el 22% en la copa y en todo el árbol, lo cual limita la floración y fructificación. Gouaniapolygama y Cissusverticillata fueron los bejucos con mayor incidencia en la ocupación de los árboles. La mayor afectación de los bejucos ocurre en los árboles jóvenes con diámetro entre 6 a 10 cm, que constituyen facilitadores para que las trepadoras alcancen el dosel del bosque, ademáslas especies amenazadas Juglansjamaicensis y Magnolia cubensissubsp. cubensis, fueron afectadas por estos elementos estructurales en un 33 y un 81% respectivamente.
Palabras clave: trepadoras, estructura florística, árboles, bosques cubanos, Área protegida.
ABSTRACT
The study was carried out in the montane rain forest of the Turquino National Park with the objective of evaluating the occupation of the vines in the trees. A random sampling was carried out, placing 70 plots of 100 m2, where individuals with more than 5 cm of d1, 30 m were recorded. In order to determine the effect of the vines on the structure of the forest, the degree of occupation by the trees on four trees was determined. The floristic richness of the forest was concentrated in the presence of 74 species, 65 of trees and 9 of vines associated to 58 genera of 35 families and 8 genera of 7 families respectively. The arboreal flora had a high percentage of affectation by the bejucos (74% ), Affecting 22% in the crown and throughout the tree, which limits flowering and fruiting. Gouaniapolygama and Cissusverticillata were the vines with greater incidence in the occupation of the trees. The greatest involvement of the vines occurs in young trees with diameter between 6 and 10 cm, which are facilitators for climbers to reach the forest canopy, in addition to the threatened species Juglansjamaicensis and Magnolia cubensis subsp. Cubensis, were affected by these structural elements by 33 and 81% respectively.
Key words: climbers, floristic structure, trees, cuban forests, protected area.
INTRODUCCIÓN
Los bejucos, voz caribeña que en un sentido amplio, refiere a plantas trepadoras, sean leñosas o herbáceas (Cabanillas y Hurrell, 2012),son importantes componentes estructurales característicos de los bosques tropicales. En estos bosques, entre el 10 y 45% de los tallos leñosos pertenecen a las trepadoras (Pérez y De Meijere, 2005). A pesar de prestar importantes servicios a nivel ecosistémico y ser parte importante de la biodiversidad del bosque tropical, el aumento en la abundancia de estas especies de plantas puede convertirse en un problema ambiental y económico (Lauranceet al., 2001 y Phillips et al., 2002).
Este tipo de plantas quees realmente abundante y diverso en los bosques tropicales (Putz, 2008 y Schnitzer, 2005), a consideración de Frederickseny Peralta(2001) tiene un efecto negativo en el crecimiento, supervivencia y producción de semillas de los árboles, y por tanto diagnosticar el porcentaje de árboles afectados y el grado de ocupación que estos posean, permite conocer la severidad del problema para cada especie, y de esta manera prever el tratamiento silvicultural a aplicarse.
Considerando lo antes expuesto y conociendo además que el Bosque pluvial montano, del Parque Nacional Turquino, ha sido asediado por el Hombre en busca de sus más importantes especies maderables,afectándosepor tanto la estructura y composición de esta formación forestal, así como que los bejucos proliferan con el cambio global y reducen diferencialmente la sobrevivencia, crecimiento y reproducción de los árboles, interviniendo en el balance competitivo entre especies arbóreas (Garrido et al., 2012), es que se identifica como objetivo del trabajo evaluar la ocupación por los bejucos en los árboles del Bosque pluvial montano.
MATERIAL Y MÉTODO
Caracterización del área de estudio
El estudio se realizó en el bosque pluvial montano del Parque Nacional Turquino en las Unidades Zonales de Conservación (UZC) Santo Domingo y La Platica, localizadas entre los 500 y 1 300 msnm. Con una temperatura media anual de 16 a 20 oC y unas precipitaciones de 2 200 mm a 2 600 mm anuales (Lastres et al., 2011; GEOCUBA, 2012). Por otra parte, el relieve es complejo y con pronunciadas pendientes (15 a 45o) (GEOCUBA, 2012), por ello González y De Armas (2007) lo consideran vigoroso.
Tamaño de la muestra
Se establecieron 70 parcelas de 100 m2 (0,7 ha) distribuidas en siete sitios: en la UZC Santo Domingo: Jeringa Arriba (JA), Jeringa Abajo (JB), Armando Osorio (AO) y en la UZC La Platica: Minihidroeléctrica (MH), Rolando Arriba (RA), Rolando Abajo (RB) y Altos de Palma Mocha (PM), siguiendo las orientaciones de Mostacedo y Fredericksen (2000); Ortíz y Quiróz (2002) y Copattiet al.(2012), para el estudio de la masa arbórea ocupada por los bejucos.
El inventario de los árboles se desarrollóa partir de un muestreo aleatorio,donde se registraron los individuos con más de 5 cm de d1,30 m (Timilsinaet al., 2007yDutra, 2011). Para determinar la suficiencia del muestreo se construyó la curva área-especie, y se utilizaron los estimadores no paramétricos Cole Rarefaction, ACE y Chao 1,mediante el programa Estimatesversión 9.0. (Colwell, 2013), según orienta Álvarez et al. (2006).
Composición florística del bosque
Se realizó la identificación botánica preliminar de las especies de árboles y bejucos en el campo y después se confirmó con literatura apropiada: Acevedo y Strong (2012), así como con la colección de muestras del herbario del departamento de Ingeniería Forestal de la Universidad de Granma, del Jardín Botánico Cupaynicú y del Centro Oriental de Biodiversidad y Ecosistemas (BIOECO). Para el estudio de la composición florística del bosque se confeccionó una lista florística.
Grado de ocupación por bejucos
El impacto de los bejucos sobre la estructura arbórea del bosque se determinó a partir de la metodología expuesta por Contreras et al. (1999).
Las diferencias entre las categorías de ocupación y el número de árboles fueron analizadasmediante un análisis de varianza de clasificación simple, y de la prueba de comparación múltiple de medias HSD de Tukey, realizados con el software SPSS ver. 21.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
La curva área - especie (Figura 1) indicó que el muestreo con 70 parcelas distribuidas en el área, fue suficiente para representar la composición florística. Con 62 parcelas se alcanzó un 89% del total de especies en el muestreoy el incremento en la intensidad de muestreo no provee un aumento significativo en la riqueza de especies.
La eficiencia del muestreo alcanzó entre un 94% y un 96% (Tabla 1) superando el valor mínimo requerido para el análisis de biodiversidad (85%) según Álvarez et al., (2006) en su Manual de métodos para el desarrollo de inventarios de biodiversidad, con lo cual se justifica que el muestreo fue suficiente y representativo del bosque objeto de análisis.
Análisis florístico del Bosque pluvial montano en el Parque Nacional Turquino
La flora registrada incluyó 42 familias, 66 géneros, 74 especies. Los árboles se distribuyeron en 35 familias, 58 géneros y 65 especies, mientras que los bejucos se agruparon en 7 familias, 8 géneros y 9 especies, denotando una diversidad florística considerable para este tipo de bosque húmedo.
Las familias con mayor riqueza de especies fueron Lauraceae, Meliaceae, Melastomataceae, Piperaceae y Rutaceae con cuatro taxa respectivamente (12%) y Annonaceae, Moraceae, Rubiaceae y Vitaceae con tres taxa cada una (9%). Por otra parte, el 26% de las familias (11) estuvo representado solo por dos especies mientras que el 53% (23 familias), solo por una especie, esto evidencia la heterogeneidad florística del bosque.
Un conjunto de especies relacionadas con la acción del hombre y la sucesión ecológica formó parte de la flora identificada. En este sentido Citrus aurantiumL., Citrus sinensis(L.) Osbeck, CoffeaarabicaL.,ChrysophyllumcainitoL., Erythrinapoeppigiana(Walp.) O.F.Cook, Inga veraWilld,Mangifera indicaL.,PsidiumguajavaL., y Samaneasaman (Jacq.) Merr., constituyen elementos florísticos relacionados con el fomento de la cultura cafetalera y la subsistencia de los caficultores en las montañas de la Sierra Maestra, según Lastres et al.(2011).
Entre los elementos florísticos característicos del formación forestal en análisis, la presencia de nueve especies de bejucos (ArthrostylidiummultispicatumPilg.,Cissampelospareira L.,CissusmicrocarpaVahl, Cissusverticillata(L.) Nicolson&Jarvis, Gouaniapolygama (Jacq.) Urb., MikaniamicranthaKunth., TetraceravolubilisL., Trichostigma octandrum (L.) H. Walter y VitistiliifoliaHumb. &Bonpl. ExRoem. &Schult.), representó el12% de la flora inventariada, lo cual confirma que comprenden entre el 10 y el 40% de los individuos y especies vegetales de las selvas tropicales (Garrido et al., 2012 y Schnitzer y Bongers, 2011) y que según Herrera (2007)no abundan en los bosques cubanos, solo en aquellos que han sido afectados por la acción del hombre o de la naturaleza.
Grado de ocupación por bejucos en los árboles del bosque
Un total de 48 especies mantienen sus árboles ocupados por los bejucos (Tabla 2) mientras que solo 10 especies se encuentran libres de ellos, esto responde probablemente a las afectaciones de la estructura del bosque o a la propia selectividad de las trepadoras. Es importante resaltar que las especies Gouaniapolygama y Cissusverticillata son las de mayor frecuencia de ocupación sobre los árboles demostrándose su alta adaptabilidad a las condiciones ambientales del bosque y a la estructura morfológica de la mayoría de los árboles presentes en la formación forestal.
Tabla 2. Comportamiento de la ocupación por bejucos en la masa arbórea
Especies |
Categorías de ocupación por bejucos |
Total |
Árboles con bejucos |
||||||||
1 |
2 |
3 |
4 |
No. |
Porcentaje del Total |
||||||
No |
% |
No |
% |
No |
% |
No |
% |
||||
Samaneasaman |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
1 |
2 |
1 |
1 |
100 |
Ocotealeucoxylon |
0 |
0 |
4 |
2 |
3 |
4 |
0 |
0 |
7 |
7 |
100 |
Chrysophyllumcainito |
0 |
0 |
1 |
1 |
1 |
1 |
0 |
0 |
2 |
2 |
100 |
Chionanthusdomingensis |
0 |
0 |
1 |
1 |
0 |
0 |
2 |
4 |
3 |
3 |
100 |
Hyperbaenaaxillifora |
0 |
0 |
1 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
1 |
1 |
100 |
Guazumaulmifolia |
0 |
0 |
1 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
1 |
1 |
100 |
Spondiasmombin |
0 |
0 |
1 |
1 |
1 |
1 |
0 |
0 |
2 |
2 |
100 |
Trichiliahirta |
0 |
0 |
1 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
1 |
1 |
100 |
Guatteriablainii |
0 |
0 |
2 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
2 |
2 |
100 |
Psychotriaberteroana |
0 |
0 |
0 |
0 |
1 |
1 |
1 |
2 |
2 |
2 |
100 |
Talaumasp. |
0 |
0 |
3 |
2 |
1 |
1 |
2 |
4 |
6 |
6 |
100 |
Cedrelaodorata |
1 |
0 |
4 |
2 |
1 |
1 |
1 |
2 |
7 |
6 |
86 |
Ficus membranaceae |
5 |
1 |
12 |
7 |
7 |
9 |
3 |
5 |
27 |
22 |
81 |
Cassia biflora |
4 |
1 |
4 |
2 |
3 |
4 |
8 |
14 |
19 |
15 |
79 |
Licariajamaicensis |
3 |
1 |
6 |
3 |
4 |
5 |
0 |
0 |
13 |
10 |
77 |
Sapiumlaurifolium |
7 |
2 |
10 |
6 |
2 |
3 |
5 |
9 |
24 |
17 |
71 |
Zanthoxylummartinicense |
5 |
1 |
11 |
6 |
1 |
1 |
0 |
0 |
17 |
12 |
71 |
Inga vera |
1 |
0 |
2 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
3 |
2 |
67 |
Pseudolmediaspuria |
1 |
0 |
2 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
3 |
2 |
67 |
Andirainermis |
2 |
1 |
2 |
1 |
2 |
3 |
0 |
0 |
6 |
4 |
67 |
Erythrinapoeppigiana |
9 |
3 |
6 |
3 |
7 |
9 |
3 |
5 |
25 |
16 |
64 |
Prunusoccidentalis |
19 |
6 |
22 |
13 |
6 |
8 |
4 |
7 |
51 |
32 |
63 |
Juglansjamaicensis |
8 |
2 |
3 |
2 |
4 |
5 |
6 |
11 |
21 |
13 |
62 |
Prunusmyrtifolia |
4 |
1 |
5 |
3 |
0 |
0 |
1 |
2 |
10 |
6 |
60 |
Chimarrhiscymosa |
2 |
1 |
2 |
1 |
1 |
1 |
0 |
0 |
5 |
3 |
60 |
Mangifera indica |
3 |
1 |
1 |
1 |
1 |
1 |
2 |
4 |
7 |
4 |
57 |
Dendropanaxarboreus |
32 |
9 |
18 |
10 |
17 |
21 |
4 |
7 |
71 |
39 |
55 |
Guarea guidonia |
18 |
5 |
13 |
8 |
4 |
5 |
3 |
5 |
38 |
20 |
53 |
Alchornea latifolia |
3 |
1 |
2 |
1 |
0 |
0 |
1 |
2 |
6 |
3 |
50 |
Brunelliacomocladifolia |
1 |
0 |
1 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
2 |
1 |
50 |
Psidiumguajava |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
1 |
2 |
2 |
1 |
50 |
Beilschmiediapendula |
14 |
4 |
6 |
3 |
5 |
6 |
2 |
4 |
27 |
13 |
48 |
Brugmansiasuaveolens |
3 |
1 |
2 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
5 |
2 |
40 |
Conostegiasp |
6 |
2 |
3 |
2 |
0 |
0 |
1 |
2 |
10 |
4 |
40 |
Cupania americana |
8 |
2 |
1 |
1 |
0 |
0 |
3 |
5 |
12 |
4 |
33 |
Magnolia cubensis |
2 |
1 |
1 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
3 |
1 |
33 |
Trophisracemosa |
2 |
1 |
1 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
3 |
1 |
33 |
Miconiadodecandra |
12 |
4 |
3 |
2 |
1 |
1 |
1 |
2 |
17 |
5 |
29 |
Cinnamomummontanum |
3 |
1 |
1 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
4 |
1 |
25 |
Citrus sinensis |
3 |
1 |
0 |
0 |
1 |
1 |
0 |
0 |
4 |
1 |
25 |
Trema micranthum |
13 |
4 |
4 |
2 |
0 |
0 |
0 |
0 |
17 |
4 |
24 |
Miconiaalbicans |
4 |
1 |
0 |
0 |
1 |
1 |
0 |
0 |
5 |
1 |
20 |
Caseariasylvestris |
4 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
1 |
2 |
5 |
1 |
20 |
Hibiscuselatus |
31 |
9 |
3 |
2 |
3 |
4 |
1 |
2 |
38 |
7 |
18 |
Piperarboreum |
22 |
7 |
3 |
2 |
1 |
1 |
0 |
0 |
26 |
4 |
15 |
Piperaduncum |
7 |
2 |
1 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
8 |
1 |
13 |
Prestoea montana |
16 |
5 |
1 |
1 |
1 |
1 |
0 |
0 |
18 |
2 |
11 |
Cecropiaschreberiana |
12 |
4 |
1 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
13 |
1 |
8 |
Coffeaarabica |
8 |
2 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
8 |
0 |
0 |
Cedrelacubensis |
2 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
2 |
0 |
0 |
Ceiba pentandra |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
1 |
0 |
0 |
Miconia elata |
2 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
2 |
0 |
0 |
Cyatheaarborea |
22 |
7 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
22 |
0 |
0 |
Citrus reticulata |
3 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
3 |
0 |
0 |
Citrus aurantium |
2 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
2 |
0 |
0 |
Roystonea regia |
2 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
2 |
0 |
0 |
Pinusmaestrensis |
3 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
3 |
0 |
0 |
Coccolobawrightii |
2 |
1 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
0 |
2 |
0 |
0 |
Total |
338 |
172 |
80 |
56 |
646 |
308 |
Leyenda: Categorías de ocupación por bejucos: 1- sin bejucos; 2- con bejucos solamente en el fuste; 3- con bejucos en la copa y 4- con bejucos en todo el árbol
El análisis de varianza realizado muestra diferencias significativas (F= 12,964; Sig. =0,000) entre los valores medios de las categorías de ocupación por los bejucos, y la prueba HSD de Tukey (Figura 2) reconoce que las diferencias en el número de árboles afectados en las categorías segunda, tercera y cuarta no son significativas, se destaca que más del 50% de los árboles están libres de bejucos.
En la figura 3 se aprecia como la vegetación presentó un índice considerable de ocupación por estos elementos estructurales.El 52% de los árboles se encontraron libres de bejucos, mientras que el 48% exhibió ocupación mayormente en el fuste, y sólo se avisora una potencial reducción en la fecundidad, el crecimiento y la sobrevivencia del 22% de los árboles, al resultar ocupadas sus copas parcial o totalmente, como resultado de la competencia de los bejucos por el recurso luz, aspecto argumentado por Begónet al. (2006).
El número de árboles afectados por bejucos estuvo cerca del 65% registrado por Malizia y Grau (2006) para la selva de las Yungas, Argentina. Se encuentra además en el rango de ocupación registrado en muchos bosques tropicales que va desde 40% a 63% de los árboles con diámetro a 1.30 m e»10 cm (Pérez y DeMeijere, 2005), con lo cual se demuestra la certeza de que las plantas trepadoras son un elemento conspicuo de las selvas, por su abundancia tal y como expusieron Cabanillas y Hurrell (2012) en su discusión sobre tipos biológicos y clasificación de las plantas trepadoras.
En este análisis fue interesante detectar la presencia de árboles libres de bejucos desde los 3 cm hasta los 50 cm de diámetro, así como árboles afectados en todas las clases diamétricas (Figura 4),mientras que la mayor ocupación de bejucos se encontró en árboles con diámetros entre 6 cm y 10 cm. Este hecho revela el mecanismo de facilitación que brindan los árboles a las trepadoras para alcanzar el dosel, ya que constituyen los de mayor representatividad en la masa y como refieren Schnitzer y Carson (2010) constituyen el estrato de árboles jóvenes en regeneración más perjudicado por el desarrollo excepcional de los bejucos.
Al considerar por tanto el efecto negativo de los bejucos, es de suponer que especies o individuos con alto porcentaje de las trepadoras tienen, a juzgar por Ingwell et al. (2010), mayores desventajas desde el punto de vista reproductivo. Siendo así algunas especies, cuya abundancia oscila entre 1 y 7 como Chionanthusdomingensis Lam., Guatteriablainii (Griseb.) Urb, Guazumaulmifolia Lam., Hyperbaenapaucinervis Urb., Ocotealeucoxylon (Sw.) Laness., Spondiasmombin L., Talaumasp., y TrichiliahirtaL., revelan mayores dificultades al estar afectados el 100% de sus árboles.
Asimismo, otras especies propias de la vegetación de montaña como Licariajamaicensis (Nees) Kosterman (77%), Ficus membranaceae C. Wright.(81%), Prunusoccidentalis Sw. (63%); Juglans jamaicensisC. DC. (62%) y Magnolia cubensis Urb., subsp., cubensis (33%), mostraron afectación de sus individuos entre un 33 y un 81%, lo cual amerita especial atención sobre la base del riesgo que corren por la potencial reducción de su fecundidad y supervivencia, ya que los árboles fuertemente atacados por los bejucos tienen a criterio de Ingwellet al. (2010) y Schnitzer y Bongers(2011) el doble de probabilidad de mortalidad frente a aquellos con menor infestación. Por tanto, esto sugiere que la acción de las trepadoras puede constituir uno de los agentes que inciden en la rareza de los árboles de Juglansjamaicensispresentes en la vegetación.
Por otra parte, se detectó que especies como Cedrelacubensis L., Ceibapentandra L., Cyatheaarborea (L.) J. Sm., Miconia elata (Sw.) DC., Roystonea regia (Kunth) O.F. Cook, Pinusmaestrensis Bisse y Coccolobawrightii Linda uno resultaron afectadas por los bejucos. Todo parece indicar que las mismas presentan mecanismos para evadir la colonización por lianas. En este sentido Clark y Clark (1990) exponen como principales características el rápido crecimiento, la arquitectura monopódica y el desrame natural, de igual forma Boom y Mori (1982) agregan que las cortezas caedizas ofrecen dificultades a las lianas en su escalada hacia el dosel y Putz (1984) afirma que los árboles capaces de mantenerse libres de lianas son aquellos de especies pioneras, características de inicios de sucesión.
CONCLUSIONES
· La flora del bosque presenta un alto porcentaje de afectación por los bejucos, mayormente en la copa y en todo el árbol, constituyendolos árboles jóvenes de 6 a 10 cm facilitadores de las trepadoras en su ascenso al dosel, con lo cual se limita su capacidad potencial de reproducción.
· Los árboles de Juglansjamaicensis y Magnolia cubensissubsp. cubensis, especies amenazadas, resultaron afectados por los bejucos, lo cual amerita especial atención sobre la base del riesgo que corren por la potencial reducción de su fecundidad.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Recibido: julio
2015.
Aprobado: octubre 2015.
José Luis Rodríguez Sosa. Doctor en Ciencias Forestales. Máster en Ciencias Forestales. Universidad de Gramna, Cuba. Correo electrónico: jrodriguezs@udg.co.cu